Tan útil y gustoso, ¿quién sería?
Ese toma lo que quieras hace que en la psique del asaltante comience a bailotear una idea. Los pasos de ese baile retumban en su cabeza. Dejándose llevar por esos pensamientos, el asaltante sosten a la víctima por las muñecas, la inmoviliza y se pone sobre ella.