Le gustan las fantasías, los juegos y es una experta en el arte de la seducción
Convertir la caricia en un arte. La práctica del slow sex no puede concebirse sin la caricia. La caricia estimula las zonas erógenas y, modulándose (es decir: no centrándose única y solamente en lo genital), va acrecentando, lentamente, el nivel de excitación de los miembros de la pareja.,
